El 19 de septiembre del 2017 a las 13:14:40 horas la Ciudad de México revivió un suceso que marcó su historia en 1985: un terremoto con magnitud de 7.1 grados afectó gran parte de la capital del país, principalmente en colonias como Condesa, Del Valle, Narvarte, Roma Norte, Roma Sur y Portales.
La sociedad se organizó y llegó a las zonas dañadas con distintos víveres, como agua y alimentos para los afectados y rescatistas, así como con herramientas para remover los escombros.
Sin embargo, otros rescatistas que llamaron la atención fueron los músicos, ingenieros de audio y personas que laboran dentro de la industria musical, quienes con micrófonos, interfaces, grabadoras, bocinas, amplificadores y monitores ayudaron a escuchar mejor los llamados de auxilio de aquellos que aún se encontraban atrapados bajo los escombros. Pese a que muchos artículos de este tipo se vieron dañados, aquellos mexicanos solidarios no lo pensaron dos veces, pues ese equipo de audio, logró dar vida de una forma distinta, salvando personas.
Otra industria que se hizo presente fue la del cine y la televisión, debido a que los trabajos de búsqueda se alargaron hasta altas horas de la noche y por varios días, por lo que algunos donaron y prestaron las luces que utilizan para grabaciones en exteriores e interiores, siendo de gran ayuda en la visibilidad de los rescatistas.
Así mismo, instituciones que se encuentran conectadas con la industria de los medios creativos como SAE Institute México, ofrecieron sus instalaciones como centros de acopio para donación de víveres y algunas otras como asilo para personas que habían resultado damnificadas.
En México siempre recordaremos esta fecha como un suceso que marcó al país y la memoria de aquellos que perdieron la vida, pero también como la muestra de las cosas buenas que caracterizan a los mexicanos y que todos tenemos algo que aportar a nuestra nación.
Ese día los medios creativos se hicieron presentes una vez más.
